Enfermedades comunes de los gatos
Si convives o piensas convivir próximamente con un gato en casa deberías pararte un momento a informarte sobre las enfermedades que pueden sufrir los gatos. Existen algunas razas de gatos más propensas que otras a padecer ciertas enfermedades pero, en general, las enfermedades que sufren los gatos son comunes a casi todas las razas o tipos de gatos. Aclarar que, aunque son enfermedades que los gatos tienden a sufrir no quiere decir que todos los gatos padezcan estas enfermedades, al igual que no asegura que una raza de gato u otra no la vayan a padecer.
Muchas de las enfermedades de los gatos pueden evitarse controlando su salud mediante visitas periódicas al veterinario y con su correspondiente calendario de vacunas al día. Además, cabe destacar que los gatos caseros que no salen con frecuencia a la calle tienen menos posibilidades de contraer enfermedades que los que pasan más tiempo fuera de casa ya que casi todas éstas enfermedades son víricas y/o parasitaria.
Cualquiera de estas enfermedades puede ser contraída por tu gato a través de una intoxicación alimentaria, una infección o un parásito entre otras, causándole un daño que, en ocasiones, puede ser grave.
Enfermedades más frecuentes de los gatos
Os mostramos a continuación las enfermedades más frecuentes que sufren los gatos para que puedas estar informado sobre la salud y el bienestar de tu mascota.
Insuficiencia renal en gatos
Se trata de una enfermedad común de los gatos que suele aparecer durante su etapa adulta teniendo más posibilidades de contraerla tras los 8 o 10 años de vida. Esta enfermedad cursa con una deficiencia en los riñones (aparato excretor) haciendo que éstos no cumplan sus funciones con normalidad y evitando que se produzca el filtrado y la eliminación de impurezas presentes en la sangre. Es muy importante estar pendiente del comportamiento del gato ya que será de vital importancia para su salud la detección precoz de esta enfermedad para poder alargar su calidad de vida.
Síntomas de la insuficiencia renal en gatos
- Falta de apetito pero es conveniente ayudar al gato para que coma un poco.
- Bebe mucha agua ya que al contar con una insuficiencia en los riñones no puede retener los líquidos y, por tanto, no puede concentrar la orina. De este modo se mantiene hidratado.
- También puede verse un deterioro de su pelaje el cual encontraremos con menos brillo y vitalidad.
- Vómitos, mal aliento y ulceraciones en la boca aparecen en los gatos con insuficiencia renal.
La insuficiencia renal en los gatos es inherente a diferentes complicaciones en los niveles corporales normales de electrolitos y proteínas, y los síntomas citados no son, en ningún caso, determinantes para definir la presencia de la enfermedad, para ello será necesario realizar un análisis de sangre y orina.
Tratamiento de la insuficiencia renal en gatos
El problema para la aplicación de un tratamiento en el caso de la insuficiencia renal es que no está determinado el origen de esta enfermedad. El veterinario solo podrá guiarse basándose en su sintomatología y, en algunos casos, una terapia intravenosa puede paliar los efectos de la deshidratación y del aumento en los niveles electrolíticos.
Es importante prestar especial atención a la alimentación de los gatos que sufren insuficiencia renal, ayudarlo a comer ya que carecerán de apetito, administrandole pienso húmedo en lugar de seco y facilitarle una alimentación específica para gatos con insuficiencia renal que debe ser baja en proteínas.
Leucemia felina
Se trata de una enfermedad provocada por el virus FeLV, hablamos aquí de una enfermedad que puede resultar bastante grave si no se trata a tiempo, incluso en ocasiones, puede llevar a la muerte del gato ya que esta enfermedad desarrolla tumores en los diferentes órganos del felino. Se contagia mediante un virus cancerígeno a través de los fluidos corporales. Se da más frecuentemente en gatos callejeros siendo los gatos domésticos o caseros los que menos probabilidad tienen de contraerla. Existe una vacuna para tratar esta enfermedad que irá acompañada de no mantener contacto con otros gatos enfermos. Destacar que los gatos no pueden contagiar al ser humano con esta enfermedad.
Síntomas de la leucemia felina
- Esta enfermedad provoca en los gatos una gran depresión del sistema inmunitario por lo que sus defensas se ven claramente disminuidas frente a infecciones o ataques inmunitarios.
- Produce una notoria lentitud en el crecimiento del gato afectado y general grandes posibilidades de desarrollar algún tipo de cáncer.
- Pérdida de peso y la presencia de fiebre, falta de apetito y inflamación de los ganglios linfáticos.
En función de las diferentes condiciones como la edad, la salud, su fortaleza física, los hábitos y la genética de cada una de las razas de gatos, algunos tendrán más posibilidades que otros de sobrevivir o superar la leucemia felina y, en ocasiones puede llegar a desaparecer, o padecerla durante toda su vida.
Tratamiento de la leucemia felina
En la actualidad, no existe ningún tratamiento específico contra el virus FeLV que provoca la leucemia felina por lo que solo podrá administrarse un tratamiento de soporte que normalmente incluirá antibióticos. Es muy aconsejable evitar situaciones de estrés y el contacto con otro gato infectado (en caso de tener más de un gato en casa).
Vacuna de la leucemia felina
Aclarar en este punto que la vacuna es un método preventivo y no curativo, es decir, que si el gato ya está infectado la vacuna de la leucemia felina no conseguirá resultado alguno. Por ello, desde Gato y Felino aconsejamos vacunar a todos los gatos, tanto si salen a la calle como si no, para evitar así que contraigan enfermedades. No obstante, no esta demostrada la eficacia 100% de esta vacuna concreta (leucemia felina).
Inmunodeficiencia felina
También llamada de forma popular como "sida felino" por su acción parecida a la del VIH de los seres humanos. Se contagia mediante la sangre y la reproducción y, al igual que el VIH produce una severa depresión del sistema inmunológico. Junto a la panleucopenia felina es una de las enfermedades más frecuentes en los gatos y la diferencia entre ambas radica en que la inmunodeficiencia felina cursa con un virus de carácter lento que puede ir afectando poco a poco el sistema inmunitario de los gatos durante un largo periodo de tiempo. Esta enfermedad solo afecta a los gatos y no produce ningún efecto en los humanos. La inmunodeficiencia felina ayuda en la reproducción de otras infecciones secundarias las cuales son las principales causas de muerte en los gatos. En un gato que ya haya contraído la inmunodeficiencia felina pueden darse tres situaciones diferentes:
- Que el gato genere anticuerpo para superar al virus y volverse inmune a él.
- Que el gato sea portador del virus pero no padezca la enfermedad ni sus síntomas.
- Que el gato pueda seguir su vida normal pero con una disminución de su sistema inmunitario.
Síntomas de la inmunodeficiencia felina
- En la primera etapa del virus puede manifestarse mediante fiebre y linfadenopatía (inflamación de los glanglios linfáticos). Además existirá diarrea y dificultad respiratoria leve. Tras la primera fase el gato puede recuperarse pero todos los gatos contagiados se convertirán en portadores de este virus.
- Durante la segunda fase, que puede durar hasta 4 años, los síntomas no están a la vista ya que se trata de alteraciones en el sistema inmunitario que no podemos detectar a simple vista.
- La tercera etapa es corta durando apenas unos pocos meses y se presenta con fiebres altas, anorexia, pérdida de peso, anemia y trastornos en su comportamiento habitual.
- En la cuarta fase aparecen las infecciones secundarias de todo tipo, los gatos que superan esta fase experimentan una situación similar a la de las personas que superan el VIH.
- La quinta y última fase se trata de una etapa terminal de la enfermedad y observamos delgadez extrema, trastornos oculares, trastornos psíquicos como tics nerviosos, cambios en su carácter y deterioro mental. Una vez alcanzada esta fase y sus síntomas el gato tiene muchas probabilidades de morir en un plazo de entre 1 y 6 meses.
Tratamiento de la inmunodeficiencia felina
Actualmente no existe en España ningún tratamiento o vacuna para evitar el contagio de esta enfermedad por lo que el único tratamiento aplicable sera la prevención. Para ello os mostramos una serie de hábitos recomendables para evitar que nuestro gato contraiga la inmunodeficiencia felina.
- Evitar la exposición del gato a cualquier agente infeccioso.
- Fortalecer el sistema inmunitario del gato mediante fármacos antimicrobianos.
- Buena alimentación con alto valor calórico y protéico.
- Se recomienda recurrir a la castración tanto en machos como en hembras.
Estas medidas son de suma importancia ya que los gatos inmunodeprimidos son muy vulnerables a los ataques de cualquier enfermedad, herida, parásito, etc...
Panleucopenia felina
También conocida como moquillo o parvovirosis, se trata de una enfermedad muy grave que puede provocar la deshidratación e, incluso, la muerte del gato. Esta enfermedad afecta con mayor frecuencia los gatos recién nacidos o cachorros y es una de las enfermedades que más preocupan a los veterinarios ya que suele ser mortal en la mayoría de los casos. el virus que provoca la panleucopenia felina (FPV) puede adherirse fácilmente a los tejidos (cama o sofá), juguetes y comedero del gato dificultando su eliminación o ubicación.. La propagación del virus en el organismo del gato se produce de manera rápida y agresiva. Para la detección de la panleucopenia felina es preciso realizar un análisis hematológico completo, un análisis bioquímico y un coprocultivo (análisis de heces).
Síntomas de la panleucopenia felina
- Diarrea y vómitos frecuentes
- Desgana y depresión en su comportamiento.
- Falta de apetito.
- Fiebre.
- En ocasiones, puede afectar al sistema digestivo provocando anemia, deshidratación extrema o diarrea hemorrágica.
- Si el virus afecta al cerebro alterando las funciones neurológicas del gato podemos encontrarnos con casos de ataxia, que es la falta de coordinación en los movimientos.
Tratamiento para la panleucopenia felina
No existe hoy en día ningún tratamiento específico para combatir esta enfermedad, si notas algunos de los síntomas en tu gato lo mejor será acudir al veterinario lo antes posible. El veterinario intentará aumentar las defensas del gato a través de inmunomoduladores que activarán el sistema inmunológico para que la enfermedad sea combatida desde el interior. En función de la gravedad será necesario administrar antibióticos pero lo más importante será mantener al gato hidratado.
Volvemos a hacer hincapié en la importancia de realizar las visitas al veterinario de forma periódica así como de administrar todas las vacunas a nuestras mascotas para evitar enfermedades tan graves como la panleucopenia felina, moquillo o parvovirosis.
GatoyFelino.com
Trastornos gastrointestinales
Los trastornos gastrointestinales en gatos se dan con bastante frecuencia pero no son una enfermedad grave. Surgen como consecuencia de una alergia alimentaria, de la ingesta de alimentos en mal estado o de un sistema digestivo intolerante y son raros los casos en los que los gatos sufren problemas de salud graves derivados de estos trastornos gastrointestinales.
Síntomas de los trastornos gastrointestinales de los gatos
Los síntomas de esta enfermedad no son complicados ni de gravedad, cursa con síntomas muy parecidos a los que sufre el ser humano con la misma enfermedad como vómitos, diarrea, malestar, etc.
Durante la enfermedad, se deberá prestar mucha atención al comportamiento del gato ya que los dolores pueden ser fuertes o molestos para el animal, será entonces cuando acudamos al veterinario.
Tratamiento de los trastornos gastrointestinales en los gatos
Debemos aplicar los mismos pasos que cuando nosotros mismos contraemos esta enfermedad, es decir, controlar la alimentación, beber mucha agua y evitar las grasas y las comidas copiosas.
Estaremos muy pendientes de que el gato beba agua para evitar la deshidratación y, lo más difícil, controlar si el gato vomita o hace sus necesidades fuera del arenero para retirarlas lo antes posible.
Otitis felina
Se trata de una inflamación de los oídos que puede provocar la pérdida auditiva momentáneamente y dolor. Los gatos contraen otitis por diversos motivos de la vida cotidiana como cambios de estaciones, de temperaturas o en ambientes húmedos.
Las razas de gatos de pelo largo son más propensos a padecer otitis porque su largo manto inhibe una buena ventilación del oído, haciéndolo más húmedo y, por tanto, más propenso al desarrollo de virus, bacterias y hongos causantes de esta enfermedad. Para ello recomendamos utilizar un limpiador de oídos una vez a la semana para mantener sus oídos limpios y así evitar la posible infección o inflamación. Los mejores limpiadores de oídos para gatos están aquí.
Síntomas de la otitis felina
Los gatos con otitis suelen maullar más fuerte de lo habitual, se rasca frecuentemente alrededor de los oídos, sacude mucho la cabeza y está intranquilo. También la presencia de olor desagradable en el oído del felino.
Tratamiento de la otitis felina
En este caso, el veterinario valorará el tratamiento médico, en caso de que lo necesitara, para tratar la otitis. No obstante, destacar que el mejor tratamiento es la prevención con lo que manteniendo una limpieza periódica de los oídos, secando bien su interior, reduciremos drásticamente las probabilidades de sufrir esta enfermedad.
Se conocen otras enfermedades comunes de los gatos como la conjuntivitis, cataratas, glaucoma, alergias y dermatitis que son de menor gravedad pero no por ello debemos pasarla por alto ya que, al igual que el reto de enfermedades, pueden complicarse y agravarse si no se detectan y tratan a tiempo.
La tiña de los gatos
Es una enfermedad muy grave, muy contagiosa, se desarrolla muy rápidamente y puede contagiar a los seres humanos. La tiña de gatos es una infección fúngica, es decir, esta provocada por un hongo. La tiña de gatos una infección cutánea (de la piel) que incluye las uñas. Los gatos de pelo largo son más propensos a contraer esta enfermedad. La propagación de la tiña de gatos se produce mediante esporas, éstas esporas son muy contagiosas y muy resistentes por lo que pueden permanecer en el entorno durante mucho tiempo. En tal caso, no solo será necesario desinfectar la piel del gato, también debemos hacerlo en toda la casa, en ambas situaciones usaremos productos especializados para realizar la desinfección.
Síntomas de la tiña de gatos
- Aparición de calvas en el pelo de forma circular sobre todo en cabeza, orejas y patas.
- Éstas calvas presentan hinchazón y escamas.
- El gato se rasca las calvas constantemente ya que le provoca picazón.
Tratamiento de la tiña de gatos
- Administrar antifúngicos o antimicóticos líquidos por vía oral que debe ser consentido por el veterinario.
- Será necesaria eliminar el pelo del gato en su totalidad y desinfectar su piel con productos especializados (recomendados por el veterinario). Solo así podremos matar el hongo al eliminar el medio en el que se reproduce las esporas que lo propagan.
- Usaremos champús específicos para bañar al gato.
La tiña de gatos puede ser contagiada de los gatos a las personas por lo que habrá que tener especial cuidado con esta enfermedad en casa.
GatoyFelino.com
La tiña de gatos es la enfermedad fúngica más frecuente pero existen otras muchas enfermedades provocadas por hongos tan graves como las anteriormente mencionadas, por ejemplo: la criptococosis, histoplasmosis, esporotricosis... con las que hay que tener mucho cuidado, estar muy pendiente de las condiciones físicas y la actitud de tu gato así como acudir al veterinario para solucionar estos problemas cuanto antes.
Nos gustaría resaltar que, en la medida de lo posible, lo ideal es prevenir estas y todas las enfermedades comunes de los gatos. Para ello, solo serán necesarios los siguientes hábitos:
- Es muy importante cumplir con un calendario de vacunas y visitas periódicas al veterinario.
- Buenas condiciones de vida y una alimentación adecuada conseguirán que tu gato este vigoroso y saludable.
- Muchos juegos y amor ayudan a prevenir y curar todas las enfermedades.